🖊 Mandragora: Whispers of the Witch Tree

 Mandragora: Whispers of the Witch Tree

· Primal Game Studio

Mandragora: Whispers of the Witch Tree es un RPG de acción 2D, al más puro estilo Salt and Sanctuary con tintes de Diablo y una exploración clásica de un metroidvania, desarrollado por Primal Game Studio. Este juego nos pone en un cruce de dos puntos de vista diferentes nada más empezar, entre los propósitos oscuros de nuestro gobernante que pretende cazar y utilizar a las brujas, y justo en el otro extremo con nuestros recién adquiridos poderes de mano de la bruja que nuestro personaje principal ha asesinado porque el rey ha decidido torturarla en público. Aunque esta decisión es anecdótica podemos avanzar en la historia apoyando una u otra postura cuando interactuemos con otros personajes, aún así, el desenlace será el mismo, y eso está bien porque el juego tiene una historia que contar. 

El juego que podría considerarse un souls like 2D, como ya he dicho, este juego tiene una historia que contar y quiere que tú la disfrutes independientemente del nivel de desafío que este tipo de juegos suelen suponer para el jugador medio o incluso uno más experimentado, así que voy a empezar resaltando las opciones de accesibilidad en la dificultad que te dejan reducir y aumentar ciertos parámetros de los enemigos como la cantidad de salud o daño que hacen pudiéndose ajustar desde el 100% hacia arriba y hacia abajo hasta un tope por ambos lados. Está opción permite a los nuevos jugadores a iniciarse fácilmente en el género del metroidvania o para el tipo de jugador que prefiere la exploración en lugar de los combates desafiantes, aún así esta opción es ajustable en todo momento según lo que al jugador le apetezca en ese momento. 

Y ya puestos vamos a hablar del combate y de las opciones que tenemos para afrontar esos desafíos, porque el juego cuenta con 6 clases cada una enfocada a un tipo diferente de arma, elemento y estadísticas favorables. Tenemos el clásico guerrero de espada y escudo con estadísticas centradas en la fuerza; una clase híbrida que junta melee, con efecto de estado de fuego y con magias a distancia también de fuego; el típico asesino con dos dagas centrado en el veneno y cuyas estadísticas escalan con destreza en una clara influencia de los Souls, aunque cuenta con un sistema de habilidades a desbloquear cada nivel muy inspirado en Salt and Sanctuary. Por otro lado podemos mejorar las armas y parte de nuestra armadura engastado runas que nos darán mejoras de estadísticas de ataque o defensa, o más probabilidad de causar un estado alterado, muy reminiscente de Diablo pero mucho más sencillo.

El diseño de los niveles y del mapeado, que es uno de los puntos clave de un metroidvania, es muy bueno, sin querer hacer de menos a otros juegos personalmente me ha parecido mucho mejor que el diseño de algunos mapas de metroidvanias de corte clásico más recientes como Bloodstained. La distancia entre las piedras de la bruja, puntos de descanso similar a las hogueras de Dark Souls, está muy bien medida, y si no somos capaces de encontrar una cerca para descansar significa que hay un atajo que conecta la zona en la que estamos con otra que ya hemos visitado con una piedra muy cerca, esto nos invita a explorar y revisar el mapa buscando zonas que podrían conectar con nuestra posición. Además, si queremos encontrar todos sus secretos tendremos que volver una vez obtengamos nuevas habilidades, sin contar con que también encontraremos muros invisibles que siempre nos llevan a algo muy interesante. Este juego sabe muy bien como invitar al jugador a investigar y lo recompensa por ello. Además de objetos, y diagramas que podremos usar en nuestro herrero de confianza, también encontraremos unas estatuas en las que podremos ofrecer ciertos objetos, normalmente hierbas, para conseguir un punto de habilidad extra, como ya os habréis imaginado subiremos de nivel y obtendremos mejoras de estadísticas y habilidades nuevas al hacerlo.

Mandragora sabe señalizar muy bien las cosas durante el combate y fuera de él para que aunque tengas una interfaz con tu información sepas en todo momento cuándo tienes poca vitalidad, marcando los bordes de la pantalla de rojo, o cuando estás exprimiendo al máximo tu barra de estamina en cuyo caso estos bordes se mostrarán en verde. Por otro lado, visualmente también sabe mostrar las caídas en trampas de pinchos o las zonas peligrosas, donde unas sierras o cuchillas gigantes intentarán acabar con nosotros, con unas cuantas manchas de sangre en la zona en cuestión. Con la última actualización han hecho que estas zonas más peligrosas sean menos frustrantes de repetir si morimos en ellas. También hay muchas nuevas mejoras de calidad de vida a la hora de recuperar nuestros puntos de experiencia, que obtendremos derrotando a los enemigos, ¡no todo va a ser explorar! 

El combate es muy satisfactorio y tiene muy buen game feel, como en cualquier juego de este estilo tenemos que usar nuestras habilidades y armas para poder derrotar al jefe del área para poder seguir avanzando. Los diseños de los jefes son muy buenos, algunos con referencias muy interesantes e incluso un cameo a Salt and Sanctuary. Recordad que aunque estos combates se puedan hacer complicados al inicio siempre podemos subir más de nivel, probar diferentes armas y aprendernos los patrones de ataque de cada enemigo de final de zona. Una cosa que quiero añadir aquí y que me parece genial es que aunque rebajes la dificultad no se convierte en un juego en el que todo muere de un golpe, tú como jugador tienes aún que hacer un pequeño esfuerzo por entender cómo funciona cada jefe individualmente con lo que cada combate sigue siendo especial e interesante.

Por último voy a comentar que contamos con una pequeña base de operaciones donde toda la gente a la que ayudemos podrá unirse para ofrecernos sus servicios de mejora, contaremos, entre otros, con un herrero que nos fabricará nuevas armas o armaduras, una joyera que obviamente nos ofrecerá nuevos anillos, e incluso una alquimista para obtener nuevas pociones y la opción de plantar ciertas hierbas. Cada uno de estos personajes está diseñado de manera fantástica muy reconocible y coherente con cada especialización, además podremos descubrir más sobre ellos conforme trabajemos con ellos y tendremos incluso una misión secundaria asociada cuando lleguemos a cierto nivel de amistad. Porque aunque no hay excesivos personajes secundarios, esto no se siente extraño porque los personajes conviven en zonas muy específicas por el contexto del juego y aún así nos ofrecerán pequeñas misiones secundarias con cierta regularidad, algo que personalmente me ha recordado, una vez más, a cómo Diablo gestiona los asentamientos y los personajes secundarios.

Mandragora: Whispers of the Witch Tree es un juego que realmente os voy a recomendar hoy porque me ha parecido muy bueno en todo lo que pretende hacer, bastante adictivo y entretenido ya sea porque buscáis combates desafiantes o explorar un nuevo mundo. Si os interesa (que espero que sí porque quiero una segunda parte) el equipo de desarrollo ahora mismo sigue actualizándolo arreglando pequeños errores y con planes de añadir un modo de Nueva Partida +. Lo podéis encontrar en PS5, Steam y Nintendo Switch de la mano de Meridiem.